domingo, 14 de septiembre de 2008

Cambio de tinta


Se seca la pluma,
la dejé dormir meses al margen de mi mano
y ahora pasa factura.
Escupe borbotones de tinta
intentando llenar la ausencia de las palabras
que acaece en mi cuaderno,
hoy estas manchas me duelen más que ayer
quizá porque el otoño está cerca;
se secan las hojas de mis libros
y caen.

Todo lo demás perdura,
intacto,
como si pactar con el Diablo fuese un recurso en oferta,
como si las facturas no se cargasen en la cuenta del alma.

Amenaza mañana con veintisiete años de más
y no sé dónde esconderme para no ver tantas velas;
que nadie me encuentre,
nadie excepto tú.
Tú que crees que el tiempo solo nos hace más niños.

Otro quince de septiembre…
y sigo cambiando de tinta, sin saber quién soy.

2 comentarios:

Almásy dijo...

Precisamente mañana..escribirás violeta, sin usar tinta, sólo desde dentro.Así.

Almásy dijo...

Leer y que te lean, de vez en cuando, reconforta....Mis respetos voyeur.