jueves, 23 de octubre de 2008

Agorafobia

Hay un ventanal inmenso que me separa del resto del mundo, a veces me da la sensación de que vivo dentro de una gran burbuja y eso me hace sentir bien. Sé que al resto del mundo le incomoda sentirme fría, distante pero lo que nunca llegarán a comprender es que lo hago para protegerles de mí.

Sé que basta con abrir la puerta salir a la calle y dar unos pasos, son pasos breves, quizá quince o veinte los que me separan del banco del parque. Me apetece salir y leer al aire libre pero puestos a sopesar no me sale rentable abandonar mi ubicación. ¿Para qué hacer lo que hacen el resto de los mortales cuando me puedo quedar dentro de mi mundo? Todos pueden salir, sin embargo ¿quién es capaz de entrar? Mi mente, mi vida, mi mundo es todo un enigma inclusive para mí y antes de salir a pelear con lo que hay fuera creo que sería más sensato encontrar la paz dentro de esta guerra que se libra en mi mente.

A veces me asusta el tiempo que pasará antes de que todo esté en orden, incluso llego a dudar de que esta paz sea alcanzada.La mente es como un laberinto y cada vez que giras a la izquierda o la derecha encuentras un nuevo callejón con nuevos obstáculos, nuevas metas, no pienso dejar mi laberinto sin recorrer para entrar en otros caminos que no me incumben, ni pienso dejar que nadie venga a ordenar lo que tengo desparramado por el suelo.

Ahí sigue el banco, vacío, como esperando que vaya a sentarme en él. Lo más sensato será bajar la persiana.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Y el recuerdo es un campo minado, así que no crea que se va a librar por las buenas.

Y no es por desanimar.

No nos proteja de Usted, Señora. Nos va la marcha.

Cristal Violeta dijo...

Nah, no me quiero librar tampoco, así que mejor nos quedamos y que llueva lo que tenga que llover.

Marcha? agarrateeeeeeeee jajajaj

Besotes